Canto {(-XII)2a}

Hoy me fallé a mi mismo:

no fui como debía ser;

recorrí tres universos _ _ _

sólo para verte al anochecer.

Déjame ser yo. No

       puedo

                                                                vivir

                                                          con

                                                orden.

Y la duda no es quien soy yo,

sino entender el porque de

si sigo siendo el mismo que se levantó al amanecer,

me habré fijado en ti.

Cada día me despierto,

y sólo recuerdo un rostro...

Parece ser el tuyo;

y en ese momento decido escaparme.

Huyo, y rehuyo,

sin nada seguro,

pero a medianoche he vuelto,

y descubro, que contigo

quiero pasar mi vida

(por lo menos la noche, ya que mañana seré otro).

Hoy recurrí al cuaderno

con un cierto despecho,

pero el sólo hecho de mencionarte...

Me hizo recordar que serás mía,

cuando el anhelado crepúsculo

me conceda la memoria.

Ahora, sería un buen momento,

momento para dejar de escribirte;

ya que luego seré tuyo,

pero un poco después seré polvo...

...Un polvo que en la mañana se construirá

de una forma distinta como un puzzle.

Y volveré a escribirte una canción

(k0Nn lOsS d3$ORdeneZ ke m3 Karakteris4n),

pero que retomaré sólo por gusto;

el gusto de verte,

que a pesar que yo cada día cambie...

Tú siempre serás tú.