Primero que nada, o más bien, primero que
todo (creo que en el fondo es lo mismo), debo presentarme. Me llamo Francisco,
algunos me apodan “Flaco”, y como músico y al escribir me llamo “Ossek”. Algún día
pensé que Ossek era un buen nombre (a mi gusto), pero necesitaba algo más...
entonces intenté unir la letra “D” con la “M” que son las iniciales de nombres
anteriores y cree “D.M. Ossek”, lo que no me convenció y entonces pasó a
ser “D-mente Ossek” que era un evidente
juego de palabras. Pero hubo un obstáculo, y es que me di cuenta que ese
adjetivo, de una u otra forma, era muy usado por artistas y figuras públicas
para intentar llamar la atención o causar polémicas. Además, es una palabra que
me diferenciaría muy poco del resto, pensando en que Santiago es una de las
ciudades de más enfermos mentales del mundo... así que vino mágicamente por las
rarezas del norte, una desidiosa paloma que gritó en mis fosas nasales este
término tan rebuscado de “Non-grato”, y encajó perfectamente en lo que estaba
buscando.
En este momento, estoy en una plaza, en la
soledad ambigua de la urbe, y un jardinero que está regando las plantas parece
cuestionarse que será la mierda que escribo tanto. Han pasado unos diez minutos
y he escrito casi una plana; mientras constantemente me presiono para ver
cuando me juntaré con Axioma Enigmátiko para grabar “El Viaje en Paracaídas
LP”, y una de múltiples personalidades (soy más que tri-polar...) asume que no
hay espacio para mi en esta efímera etapa llamada vida. Por tales motivos, me
vi forzado a crear un espacio para los que como yo, quieren drogarse, hacer
zoofilia, y escuchar Rock’N’Roll Coreano. Las reuniones son en tu mente,
generalmente mientras duermas, cerca de las 3 a 4 A.M. en el tiempo relativo;
bienvenidos.
“Perdona si alguien aquí no es de tu agrado,
pero es que es un club muy amplio: sólo para
non-gratos.”
A continuación nuestro himno a la república
Non-grata (debes pararte a cantar maldito inmoral)...
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